Cómo congelar brócoli
El brócoli fresco es una de las verduras más beneficiosas para la salud, por esta razón es recomendable congelarlo para poder disfrutar todo el año de esta verdura.
Congelar el brócoli es algo muy fácil y, en ocasiones, incluso esta verdura tendrá un sabor y una textura mejor que cuando se compra fuera de temporada.
Cómo congelar brócoli y no perder vitaminas
Primero hay que seleccionar un brócoli que se encuentre en buen estado y apariencia; tiene que contar con cabezuelas verdes y bien cerradas, es mejor que no se hayan empezado a separarse o volverse amarillas. Se enjuagará el brócoli y se quitará cualquier suciedad, bichito o restos de cualquier tipo.
Es también recomendable preparar un baño de sal y sumergir el brócoli una media hora, esto matará cualquier bicho y los hará subir a la superficie, posteriormente se desechará el agua y se enjuagará el brócoli.
Se cortará el brócoli en ramitas, el tallo inferior también hay que cortarlo en pedacitos de no mucho grosor para que no haya problemas al congelarlo. Hay que colocar el brócoli en un bol y llenarlo de agua, exprimir el jugo de medio limón, se mezcla todo bien y se deja reposar durante 5 minutos, después se vierte la mezcla en una olla de cocción.
Se añade más agua a la olla hasta cubrir el brócoli, se lleva el agua a ebullición para hervir el brócoli, una vez hecho esto hay que dejarlo enfriar después de colar el agua. Se escurre el brócoli y se elimina el exceso de agua.
Ahora sólo queda racionar el brócoli en pequeñas bolsas plásticas para congelar, hay que tener en cuenta que cada una de estas bolsas tendría que contener el producto necesario para una comida familiar, de esta manera no habrá que descongelar lo que no se necesite y no hay peligro a que el producto se eche a perder.
Consejos para congelar el brócoli
Si el usuario no dispone de un sellador al vacío, se puede cerrar la bolsa de zíper hasta el final, se inserta una pajita en la abertura y se saca el aire restante a través de ella. Sólo queda retirar la pajita cuando se haya terminado de sellar la bolsa. No olvidéis etiquetar la bolsa con la fecha en la que se congelo el brócoli, es recomendable utilizarlo en un plazo de 9 meses para un mejor sabor y valor nutricional.